28.6.11

Se viene la Copa América, Argentina 2011...



Se viene la Copa América, estimados.


Recuerdan como otras veces el gobierno ha metido golazos a la voluntad del país con los hechos que distraen la atención pública como este evento que se avecina. 

Se les recuerda tener una postura proactiva, no dejar que el desvío de la atención que se viene opaque el movimiento por una educación mas justa.





Estudiantes encarnan un Chile mejor









Cuando los medios masivos imponen sus imágenes de violencia y truculencia sobre un fenómeno social como el movimiento estudiantil, cuesta mucho “sacárselas” de la cabeza y de los ojos. Es casi imposible borrar una imagen una vez que la hemos visto. Podemos cuestionarla, analizarla, rechazarla, pero ya está instalada.

Pero quizás, el efecto más dañino de los medios, en la construcción cotidiana de la realidad “noticiosa”, es lo que ocultan, lo que no muestran. En este caso nos ocultan la esperanza.
Cuando no muestran la calidad del debate de los estudiantes, la creatividad y el trabajo generoso que hay detrás de cada movilización, le niegan a Chile la posibilidad de un mejor futuro. Porque  si los chilenos vieran la calidad de sus estudiantes, de sus producciones multitudinarias que han asombran al mundo entero (como fue el caso del Thriller frente a La Moneda), tendrían más confianza en que un mejor futuro es posible.

Los chilenos sabrían que estos estudiantes no son chiquillos de la destrucción, sino que están trabajando seriamente por sus propuestas, esforzándose por comunicarnos lo que sienten frente al sistema, proponiendo alternativas que tanto en forma como en contenido deberían enorgullecernos y darnos confianza.

Estos muchachos no lo están haciendo por ellos, lo están haciendo por todos nosotros, por un Chile que durante demasiado tiempo aceptó justicia, educación, cultura, salud en la medida de lo posible. Estos estudiantes, con madurez y creatividad están cuestionando los límites de ese posible y proponiéndonos una mejor convivencia, construir un mejor país. Ojalá las clases políticas y las mayorías ciudadanas perdamos el miedo y aprovechemos  la oportunidad que nos ofrecen.